A una semana de la masacre a manos del Ejército mexicano, en la que murieron cinco jóvenes, uno de ellos, de nacionalidad estadounidense, además de un sobreviviente y otro más hospitalizado que lucha por su vida, personal de la Fiscalía General de la República (FGR) llevó a cabo técnicas de campo en el lugar de los hechos, en la colonia Manuel Cavazos Lerma.

Y es que fue el pasado domingo 26 de febrero, cuando cuatro militares, actualmente detenidos en la Ciudad de México, abrieron fuego sin motivo alguno contra la camioneta en la que viajaban siete jóvenes quienes no traían armas, cartuchos, drogas, es decir, nada ilícito, las víctimas regresaban a casa después de salir de una discoteca.

El abogado José Roberto Puente Martínez, quien representa a las familias de las víctimas, informó que también tomaron muestras de los daños a una vivienda afectada que recibió más de 64 impactos de bala, y elementos de la Policía Investigadora, tomaron declaración de la persona afectada, una persona de la tercera edad, con enfermedad crónica degenerativa.

Postrada en una silla de ruedas, la señora Sara Luna, propietaria de la vivienda dañada, no ha recibido ningún tipo de apoyo.

‘Desde que ocurrieron los hechos se ha sentido mal de salud, entonces está pidiendo también asistencia médica porque es persona de bajos recursos’, explicó agregó el abogado.

Visitadores Comisión Nacional de Derechso Humanos (CNDH), tuvieron un acercamiento con los familiares de las víctimas, sin embargo, era personal administrativo.

‘Solamente personal administrativo, no personal de médicos, de psicólogos ya que es lo que más requieren y necesitan porque obviamente están afectados emocionalmente y más con la persona sobreviviente que ha tenido problemas de poder salir o llevar una vida normal porque está viviendo el momento constantemente’, enfatizó Puente Martínez.

Cabe mencionar que las familias de las víctimas piden a la sociedad sea más compasiva ante la campaña de desprestigio que circula en redes sociales en torno que los jóvenes pertenecían a un grupo criminal.