En el campo de búfalos de la UAT se le rindió homenaje de despedida a Felipe Galvan mejor conocido como el "mondigas"  reportero y cronista deportivo se le dio el último adiós

En los terrenos de gimnasio de la UAT,  la casa oficial de los búfalos de la UAT – Aztlán, en  una tarde fría y nublada, amigos, familiares, couches y deportistas despidieron  a Felipe de Jesús Galván Garcés, lugar donde le gustaba estar en todos los juegos del equipo de casa, donde con una porra, no le dijeron adiós, sino hasta pronto “Mondingas”.

Su hijo César y jugadores cargaron el féretro hasta la cancha donde se ofició una misa y luego palabras que eran difíciles de pronunciar, no porque faltarían adjetivos para el amigo cronista deportivo, sino por la tristeza que se siente el ver al hijo, padre, abuelo, amigo, hermano partir a su eterno descanso.

Estuvieron presentes directivos del gimnasio como el licenciado Ignacio Hernández, Oscar Garza que habló a nombre de la UAT, su compañero, su compadre, su amigo Alberto Gamboa también hizo uso de la voz, quebrada, pero dijo lo que tenía que decir, recordar al Mondingas con su eterna sonrisa, así lo quiso recordar.

La esposa Elsa Garza De la Riva, pasó y obviamente con llanto a flor de piel, dedicó las mejores palabras que pudimos escuchar, tristes, claro y más cuando señaló que hasta ese momento entendió porque Felipe dedicaba más tiempo al deporte; -ahora lo entiendo por estas muestras de cariño que le manifiestan, gracias y me decía, te debo tiempo de amor, pero mi trabajo me quiere ahí; dijo la ahora viuda de Felipe de Jesús Galván Garcés.

Y el equipo “Búfalos” le dedicó una sonora “goooya, goooya, cachun, cachun, rara, Felipe. Galván” y se vino nuevamente una cascada de lágrimas de los presentes, QEPD el súper mandingas, hasta pronto amigo, hasta siempre hermano