El príncipe heredero al trono saudí Mohammed bin Salman declaró en una entrevista televisiva transmitida el domingo que asume toda la responsabilidad por el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi, pero negó haber ordenado el crimen.

Fue un delito atroz. Pero como líder de Arabia Saudí asumo toda la responsabilidad, especialmente porque fue cometido por individuos que trabajaban para el gobierno saudí”, dijo el príncipe de 34 años a la emisión.

Cuestionado sobre si ordenó el asesinato de Khashoggi, quien lo había criticado en sus columnas para The Washington Post, el príncipe heredero respondió: “Absolutamente no”.

Contexto
Khashoggi ingresó al consulado saudí en Turquía el 2 de octubre de 2018 para recoger un documento que necesitaba para casarse con su prometida, de nacionalidad turca.

Agentes del gobierno saudí asesinaron al periodista dentro del consulado y aparentemente desmembraron el cuerpo, que no ha sido encontrado. Arabia Saudí ha acusado a 11 personas del crimen y las ha llevado a un juicio que se ha realizado en secreto.

Hasta el momento, nadie ha sido condenado.
Un reporte de Naciones Unidas aseguró que Arabia Saudí era responsable del asesinato y que debía investigarse la posible participación del príncipe heredero en el crimen. En Washington, el Congreso estadounidense ha dicho que cree que bin Salman es “responsable del homicidio”.

Arabia Saudí ha insistido por mucho tiempo que el príncipe heredero no estuvo involucrado en el operativo en que participaron agentes que le reportaban directamente a él.

Hay quienes creen que debería saber lo que hacen a diario las tres millones de personas que trabajan para el gobierno saudí. Es imposible que las tres millones de personas envíen reportes diarios al líder o a la segunda persona de mayor rango en el gobierno saudí”, añadió.